
Las acuarelas de José Aldunate Menéndez fueron creadas para el Museo Histórico de Yerbas Buenas en 1986 para exponer los principales íconos del desarrollo de la región en la Colonia y escenas de la Batalla de Yerbas Buenas.
Las representaciones ilustran los datos proporcionados por la investigación de la profesora de historia Francisca Valdés y formaron parte de la museografía original de la institución, que exponía los movimientos y estrategias de realistas y patriotas.
La Sorpresa de Yerbas Buenas se produjo en los albores de la independencia nacional y es considerada el primer enfrentamiento bélico entre patriotas y realistas.
Al mando del brigadier Antonio Pareja, los españoles vencieron al ejército chileno a pesar de su resistencia.

José Aldunate Menéndez. El ejército español acampa en Yerbas Buenas. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-240.
En la tarde del 26 de abril de 1813 acampó en Yerbas Buenas el ejército realista constituido por un contingente de aproximadamente 6.000 hombres, al mando del general Antonio Pareja.
Su objetivo era conseguir la rendición del ejército patriota y avanzar sobre Santiago. Los independentistas acamparon en la orilla opuesta del Maule, a 44 kilómetros.
Ejército español acampa en Yerbas Buenas

José Aldunate Menéndez. El legado de la historia. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-238.
Los vecinos recuperaron su ritmo y quehaceres anteriores a la Batalla. La parroquia de Yerbas Buenas continuó con su actividad pastoral.
En 1835 un terremoto asoló el territorio situado entre el Maule y Cautín. En Yerbas Buenas sólo quedaron en pie las casas de las familias Gutiérrez y Contreras. Esta última hospedó el Brigadier Pareja y es la única construcción que prevalece desde los tiempos de la Independencia.
El legado de la historia

José Aldunate Menéndez. España imprime un nuevo sello a estas tierras. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-237.
Las reformas borbónicas del siglo XVIII iniciaron un nuevo ordenamiento territorial y urbano a través de la fundación de ciudades como epicentros de desarrollo, lo que implicó una reorganización del territorio que administraba la Iglesia para promover la evangelización.
La sede parroquial se trasladó de Abránquil a Yerbas Buenas, donde se comenzó a construir un gran templo en 1783. La iglesia se terminó dos años después, y fue sede parroquial hasta la fundación de Linares en 1794, cuando se transformó en una vice parroquia.
España imprime un nuevo sello a estas tierras

José Aldunate Menéndez. Imagen de Yerbas Buenas hacia 1813, según relatos de la época. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-239.
En el dibujo se aprecia la iglesia como centro del poblado y un espacio vacío que más adelante se convirtió en la plaza principal. A su alrededor se instalaron las casas de las familias más importantes, la mayoría grandes hacendados o empresarios agrícolas (Valdés, 1986).
Yerbas Buenas hacia 1813

José Aldunate Menéndez. La retirada patriota. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-244.
La representación da cuenta de la confusión que provocó en las filas realistas el ataque nocturno de los patriotas.
En la madrugada los chilenos descubrieron que habían atacado a un ejército 10 veces mayor que el suyo, y decidieron retirarse. El brigadier Antonio Pareja los atacó con su caballería.
Retirada patriota

José Aldunate Menéndez. La zona del Maule poco antes de la Conquista Española. Yerbas Buenas, 1976. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-236.
Hacia 1766 la parroquia de Isla de Maule reunía 2.668 adultos y 969 niños, que vivían entre el pueblo Huerta del Maule y los ríos Longaví, Loncomilla y la cordillera de Los Andes.
Zona del Maule poco antes de la Conquista Española

José Aldunate Menéndez. Jurisdicción de la Parroquia de Isla de Maule hacia 1790. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-241.
Vecinos y hacendados construyeron sus hogares junto a la iglesia de Yerbas Buenas, y dieron origen a la villa.
Este lugar adquirió renombre hacia 1813, pues aquí tuvo lugar el primer evento bélico de la emancipación nacional.
Jurisdicción de la Parroquia de Isla de Maule hacia 1790

José Aldunate Menéndez. El encuentro nocturno de Yerbas Buenas. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-242.
La imagen muestra a los 600 hombres del destacamento patriota, que atacó por sorpresa al ejército realista la madrugada del 27 de abril de 1813, en atención a que la noche anterior el alto mando enemigo había apostado pocos centinelas, pese a que sus tropas se encontraban en un espacio abierto.
Encuentro nocturno en Yerbas Buenas

José Aldunate Menéndez. Destacamento de Juan de Dios Puga inicia el ataque. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-243.
La acuarela refiere al momento en que las tropas patriotas conducidas por José María Benavente y Enrique Ross pasaron a través de los milicianos chilotes, tomaron el control de la artillería y aprisionaron a su comandante, el coronel José Berganza.
El destacamento de Juan de Dios Puga cruzó el río Maule en busca del comandante español Ildefonso Elorreag, pero no estaba allí.
En contra de las órdenes del general Carrera, Puga continuó su búsqueda y al acercarse a Yerbas Buenas creyó encontrarlo y atacó.
Destacamento de Juan de Dios Puga inicia el ataque

José Aldunate Menéndez. La Sorpresa de Yerbas Buenas. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-294.
Durante la retirada, los patriotas fueron atacados por la caballería de Elorreaga. Sólo fueron socorridos en las riberas del Maule por la división de Luis Carrera. Dejaron en el campo enemigo 190 prisioneros, entre ellos el comandante Puga y más de 50 hombres muertos. En el ejército realista también hubo muertes, deserciones, heridos y prisioneros.
Sorpresa de Yerbas Buenas

José Aldunate Menéndez. Campamento realista en la aldea de Yerbas Buenas. Yerbas Buenas, 1981. Acuarela, papel. En depósito. N° de inventario D35-52.
El campamento realista se ordenó con la caballería en los caminos de acceso a Yerbas Buenas, la artillería a los costados norte y oriente de la plaza y la infantería al centro. Allí se ubicaron también los granaderos, los Húsares y los milicianos de Chiloé. Pareja y sus oficiales pernoctaron en la casa que hoy aloja al Museo Histórico de Yerbas Buenas y en la casa parroquial.
Campamento realista en la aldea de Yerbas Buenas

















